El director del Banco Atlas, Juan Carlos Martín, defendió la postura de la entidad frente a las versiones de incumplimiento de contrato y deuda con la empresa tecnológica itti, sobre la adquisición de un software. Martín reiteró que el banco cuenta con un contrato por tiempo indefinido que autoriza el uso del sistema, y que no ha habido ninguna modificación ilegal del mismo, como se ha sugerido.
Aclaró que el banco no realizó ningún planteamiento determinado para renegociar el contrato. “El banco nunca hizo una propuesta de un monto determinado para renegociar el contrato. No sé qué vamos a renegociar, en el contrato está todo estipulado», detalló Martín.
El director del Banco Atlas también destacó que la disputa se centra en una interpretación del contrato entre dos empresas privadas, aclarando que la continuidad de las operaciones del sistema está asegurada y que el banco siempre tiene en cuenta el bienestar de sus clientes en sus decisiones.
«Estamos muy seguros de nuestra posición. Tenemos un contrato firmado en 2004 que nos permite hacer todo lo que hemos hecho. No hemos incumplido ninguna de esas obligaciones», expresó.
En cuanto al mecanismo legal que está siguiendo el banco, Martín explicó que el conflicto pasará a un arbitraje, tal como lo establece el contrato. “Termina la mediación, esto se irá a un arbitraje, que es el mecanismo ya establecido en el contrato. Así que seguimos esos pasos», explicó.
Respecto a las acusaciones de que el banco ha modificado el software más allá de lo permitido en el contrato, Martín aseguró que el banco tiene derecho a realizar modificaciones bajo su cuenta y riesgo. “El contrato nos ampara totalmente. El banco, al firmar el contrato, adquirió los códigos fuente y tiene la autorización para modificar los módulos licenciados bajo su cuenta, bajo su orden y bajo su riesgo», explicó. Y agregó, “no menciona en ningún lado la obligación de notificar los cambios, ni mucho menos pedir autorización para dichos cambios».
Con respecto a los rumores sobre una deuda pendiente, Martín fue claro en rechazar tales afirmaciones, señalando que no existe ninguna deuda. “No sabemos de dónde salió esa deuda. No existe, la oferta comercial hacia el futuro no puede generar deuda alguna», aseguró.